Por fin, objetivo conseguido. Después de la pandemia, tuvimos una gran reestructuración de nuestro juego y de nuestro equipo. Algo que se acentuó por 2023 y 2024, con la llegada progresiva a la categoría senior de muchos nuevos jugadores jóvenes que han ido entrando en el club desde 2021 y creciendo. Una reconstrucción digamos que empezaba a ver sus frutos en los dos últimos años, en los cuales ya teníamos de gran objetivo el regresar a jugar una final de la Liga de Flag Football Extremeña. Y tras dos temporadas donde estuvimos bien bien cerca de lograrlo, a la tercera fue la vencida.
En 2023 y 2024 Mérida Romanos nos apearon del sueño de la final de forma muy ajustada y dolorosa. En este 2025, los emeritenses no han podido demostrar el gran nivel de sus últimos años, y se vieron las caras en semifinales de la Final Four ante los poderosos Plasencia Ducks, ante los que cayeron por un ajustadísimo 13-6. Casi dan la campanada, pero, por primera vez en la historia, no iban a jugar una final de la LFFE.
Recordemos que los primeros campeones de Extremadura fuimos nosotros, en 2018, venciendo a Mérida precisamente. Justo el último año que habíamos disputado la final. Por eso ansiábamos tanto volver a ella. Y desde 2019, los Plasencia Ducks llevan ya cinco títulos, todos conseguidos ante Romanos (2019, 2022, 2023, 2024, 2025). El quinto ha caído en este 2025, pero en frente tuvieron a un rival distinto en la gran final, los Villanueva Black Storks por primera vez.
No fue nada fácil. Empezamos la temporada siendo uno de los grandes rivales a batir, ganando todos los partidos y solo cediendo ante Ducks. Pero en la segunda parte de la temporada regular tendríamos los dos enfrentamientos ante el equipo de Plasencia Skull Ducks, que hasta ese momento estaban teniendo suerte dispar. Y nos tocó sufrir la gran revelación de la liga y el ascenso de este equipo por partida doble. Nos veíamos sorprendidos en el partido de ida con remontada incluida de los jóvenes placentinos (33-32), y en la vuelta reafirmaron su superioridad con un resultado de 37-13. E iban a ser nuestros rivales en las semifinales… Tampoco las lesiones no nos acompañaban. De hecho José Parejo lleva de baja desde la Jornada 8, por más de un mes, jugador angular en ataque y defensa…
Su ataque liderado por el MVP de la competición, Marco Ortiz, nos resultaba imparable. Estábamos centrados en llegar a la gran final, algo que conseguimos hacer en la Copa de Extremadura Open 2024-25, y enfocados en intentar encontrar forma de derrocar al gran campeón extremeño, Ducks. Pero en esta recta final de temporada nos encontramos con un inesperado hueso duro de roer. Unos Skull Ducks que prometen tener un gran futuro.
Por ello, desde el final de nuestra regular season nos pusimos a trabajar en los entrenamientos para corregir y ajustar la defensa, y también en mejorar un ataque que en el encuentro de vuelta se vio bastante atascado ante estos Skull Ducks. Horas de entreno, de prácticas con prueba y error, de sesiones de vídeo y de scouting. Un duro trabajo que, al final, ha merecido la pena y ha obtenido sus frutos. Nos reivindicamos, nos tomamos la revancha y con creces en el momento de la verdad. Este domingo en la Final Four, pasamos por encima de los Skull Ducks para clasificarnos a la gran final extremeña y ser…¡subcampeones de Extremadura!
Algo que además dedicamos sin duda para nuestro siempre recordado Fonsi, quien sin duda nos habrá seguido y empujado jornada tras jornada allá donde esté. El gran objetivo de las últimas temporadas se ha conseguido, volver a estar entre las finales extremeñas. Una gran alegría que nos motiva para continuar en ascenso e intentar en el próximo año seguir mirando arriba y mejorar para acercarnos a ese codiciado título de campeón de Extremadura.
Black Storks 34-6 Skull Ducks
Como ya hemos dicho, la previa de esta semifinal podría hacer ver a Skull Ducks como favorito. Pero esta vez, ajustamos a la perfección nuestra defensiva, y prácticamente no íbamos a conceder ningún punto.
Primer drive, y nuestro ataque tuvo ritmo constante de avanzar yardas. A los tres minutos de juego, Álex Pastor convirtiendo touchdown y Juan Gallego el extra, hacían el 0-7. No obstante, en la primera parte la ofensiva no iba a estar tan fina como sí lo estaría en la segunda, y fallaríamos algunas posesiones. Sería la defensa la que sostenía al equipo, consiguiendo incluso Álex Pastor hasta tres intercepciones, dos de ellas en este primer tiempo. A ocho minutos del descanso, llegaba nuestro segundo golpe con mismos protagonistas sobre la zona de anotación (0-14).
Pero a estos Skull Ducks los hemos visto remontarnos tres anotaciones, y tener capacidad de meterte un touchdown en cualquier jugada y a cualquier distancia. Sin embargo, la defensa estaba muy concienciada en ello y defendiendo en profundo estaban implacables. Fruto de ello fueron las tres intercepciones concedidas y que pudieron ser muchas más por parte de los defensas Fernando Romero, Álex León o Alfonso López. También extraordinario trabajo como blitz de José Pilares, ejerciendo presión constante y sin permitir que ninguna jugada se rompiera en demasía. Así, tras el tercer turnover, un touchdown de Juan Gallego hacía el 20-0.
Mientras tanto, la ofensiva dirigida Víctor Calle siguió sumando, para evitar cualquier intento de remontada. En el minuto doce de este segundo tiempo, Juan Gallego volvía a visitar la endzone con extra de Fernando Romero (0-27). Y tras otra defensa efectiva más, ya pudimos respirar tras una posesión larga que terminó con touchdown y aterrizando ya a los dos últimos minutos, anotando Álex Pastor y con conversión de César Cidoncha (0-34). La anotación de Skull Ducks llegaría sobre el último minuto, consiguiendo encontrar la única flaqueza de todo el encuentro ya demasiado tarde. Una anotación sin importancia para la gran victoria y recital que habíamos hecho.
Final: Ducks 19-0 Black Storks
Tendríamos así la primera final de la historia entre Plasencia y Villanueva. Aunque en la Copa de Extremadura Open 2024-25 ya tuvimos un preámbulo de cómo podía terminar esta competitiva temporada extremeña. Y sería un duelo un tanto parecido al último que tuvimos en la regular season. Ducks sumando lo suficiente en ataque y en defensa siendo infranqueables ante unos Black Storks que igualmente íbamos a dar la cara y bien.
Empezamos ambos equipos midiendo nuestras fuerzas con cautela. Nadie anotaba en los primeros diez minutos. Aunque estuvimos literalmente a media yarda de hacerlo tras convertir una jugada profunda por medio de César Cidoncha, pero nos quedamos en cuarto down sin hacerlo por desgracia. Finalmente, Ducks abrió la lata con una jugada individual de “Chiki” en profundo, y además recibía el punto extra para poner el 7-0, en el minuto 13.
Tras ello, pasó otro largo tiempo de juego sin puntos. Nuestra defensa seguía tan seria como en semis, pero el ataque no encontraba forma de buscarle las cosquillas a la defensiva placentina con sus jugadas habituales. Ya a un minuto del descanso, Ducks con una nueva jugada profunda conseguía tomar ventaja a un 13-0, con touchdown de Víctor Martín.
En la segunda parte, el ataque tuvo mucho más juego intentando jugadas de engaño y doble pase que intentaban sorprender y descolocar más a la defensa. Lo conseguíamos pero seguía sin ser suficiente. A los cuatro minutos, Ducks lograba su tercer touchdown que parecía ya sentenciar. Touchdown de Alejandra que aprovechaba un fallo de nuestra defensa para hacer el 19-0.
La defensa de Ducks siguió manteniendo a raya a nuestro ataque. Además, lograron interceptar en un par de ocasiones en jugadas donde los nuestros no se entendieron. Tuvimos nuestras oportunidades de mantener vivo el partido, con una intercepción que casi logra Alfonso López anticipándose en el primer drive de los placentinos. O con un ataque que terminó a solo cinco yardas de la goal line, pero el lanzamiento a la endzone en cuarto down sería impreciso por muy poco y el pase era incompleto.. Desgraciadamente, ninguna de esas acciones lograron completarse y no conseguimos reengancharnos a la final.